Ya hemos hablado de la sesión de embarazo y del Newborn y ahora nos toca hablar de las sesiones familiares. Es cierto que las dos anteriores podrían considerarse «de familia» pero habitualmente hablamos de sesiones familiares en las que participan una familia con, al menos, un hijo algo más mayor. Quédate para saber un poco más:

Para quién va dirigida

Siempre se puede hacer una sesión familiar con un recién nacido, aunque si solo con el recién nacido hablaríamos estrictamente de newborn, se convierte en especial por las características que tiene un bebé. Pero en las familiares debe de haber un niño con, al menos 4-6 meses de edad. Pero en este tipo de sesiones no tiene porque haber un bebé. Es habitual contratarlas para hacer un regalo a algún miembro de la familia, en especial a los abuelos, así que en algunas ocasiones todos los participantes son adultos. Es por esto que hablamos de un tipo de fotografía que puede variar mucho dependiendo del rango de edades.

Características

Suelen durar entorno a 1h o incluso menos y suelen ser naturales y siguiendo los prefectos de la fotografía «lifestile». A esa edad los peques ya suelen sostenerse sentados por si mismos y facilita algunas poses, tenemos mayor libertad de movimiento y podemos incluso capturar al bebé gateando. En el caso de los niños mayores podemos tomar instantáneas más divertidas e incluir más elementos, algunos personalizados. Con lo que respecta al adulto podemos, de quererlos, hacer posados o bien os pediremos tomar acciones para que se os vea un movimiento más espontáneo. En todo caso, y lo más importante, son shootings donde se ve mucho la interacción entre vosotros, el cariño y vínculo que existe y que os hace especiales.

Algunos tips antes de vuestra sesión

  • Es bueno que el fotógrafo conozca nombres y algunas características de vosotros, especialmente de los niños.
  • Es por eso que os solemos entregar un cuestionario donde os preguntamos por los gustos de vuestros hijos: juego preferido, colores, algún cuento o peluche para traer…
  • Es muy interesante incluir animales en las tomas así que si tenéis alguna «mascota» puede ser bienvenida.
  • También es importante intentar no dirigir a los niños, sus acciones suelen ser naturalmente espontáneas delante de las cámaras y es bueno aprovecharlo. El fotógrafo os pedirá ayuda si la necesita.
  • Intentad desconectar un poco de la presencia de la cámaras y relajaros. No es fácil, lo sabemos, pero es bueno que no tengáis mucha presión.
  • Como en el resto de las sesiones: evitar marcas, rayas… y intentar ajustaros a las tonalidades y directrices de vuestro fotógrafo en cuanto a vestuario.
  • Lo más importante: venid a divertiros. Se trata de toda una experiencia que vivir en familia, ¡pasároslo bien!